Recientemente, la nueva combinación de materiales desarrollada por los investigadores de la Universidad de Stanford en los Estados Unidos ha ayudado a crear una batería recargable que puede almacenar eficientemente una gran cantidad de energía renovable generada por el viento, solar, etc.
Con un mayor desarrollo, esta tecnología puede suministrar energía a la red a un costo rápido y bajo, a temperaturas ambiente normales. Esta tecnología, conocida como tecnología de baterías móviles, ha sido considerada desde hace mucho tiempo como una de las opciones para almacenar energías renovables intermitentes.
Sin embargo, hasta ahora, el tipo de líquido que puede generar electricidad tiene los siguientes inconvenientes: limitados por la energía que se puede transmitir, la necesidad de temperaturas extremadamente altas, el uso de productos químicos altamente tóxicos o muy caros. Profesor Asistente de Ciencias de materiales e ingeniería en la Universidad de Stanford y sus estudiantes de doctorado decidieron probar el potasio y el sodio. Mezclan el potasio y el sodio en el metal líquido en la temperatura ambiente, actuando como líquido para el donante o el cátodo electrónico de la batería. Teóricamente, este metal líquido tiene por lo menos 10 veces la energía utilizable por gramo en comparación con otros materiales. "Todavía tenemos mucho trabajo por hacer", dijeron los investigadores. Es una nueva, comprable, batería móvil que puede hacer uso de los materiales abundantes en la tierra, haciendo energía solar y eólica más eficiente.